
Mientras el agente del jugador y el club rojiblanco han cerrado prácticamente un acuerdo por tres temporadas, Valencia y Athletic tendrán ahora que ponerse de acuerdo en el trato de ha de conducir a Bilbao a Aritz, que tiene una temporada más de contrato, con la entidad valencianista. Por ello, ambos clubes han de cerrar la cantidad, unos tres millones de euros, que satisfacerá el Athletic antes de hacerse con los servicios de un jugador que conoce bien la casa.
Recambio y presión
El retorno de Aduriz a Lezama, donde se formó con futbolista, supondría no tan solo un refuerzo de nivel para el ataque equipo rojiblanco, en el que Bielsa precisa alternativas, sino también una opción muy válida para suplir a Llorente en el caso de que el ariete de Rincón de Soto no pudiera jugar.
En este sentido, también serviría como medida de presión en la procelosa negociación que mantienen los representantes de Fernando Llorente, que ahora saben que detrás del 9 no hay nadie y por ello negocian en posición de ventaja, y el Athletic.
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